14/07/2025
La ONU advirtió sobre el colapso inminente de las operaciones humanitarias en Gaza por la falta de combustible
Fuente: telam
Hospitales, panaderías y ambulancias necesitan abastecerse mientras Israel mantiene restricciones al ingreso del recurso básico. 2,1 millones de personas corren el riesgo de quedarse sin servicios vitales
>Las operaciones humanitarias en Gaza se encuentran al borde del colapso total debido a la severa escasez de combustible, advirtieron el sábado múltiples agencias de las Naciones Unidas en una declaración conjunta que describe la situación como crítica para los 2,1 millones de palestinos que dependen de la ayuda internacional.
“Sin combustible, todos los bienes y servicios vitales desaparecerán para 2,1 millones de personas”, enfatizaron las agencias, recordando que el combustible es la base de la supervivencia en la Franja de Gaza.
Los hospitales, que ya operan bajo condiciones extremas, enfrentan ahora la posibilidad de un apagón total. Las unidades de cuidados intensivos, donde se atienden pacientes en estado crítico, están experimentando fallas sistemáticas que ponen en riesgo inmediato la vida de los pacientes más vulnerables.
Las unidades neonatales, que requieren energía constante para mantener incubadoras y equipos de soporte vital, se encuentran particularmente amenazadas.
El sistema de ambulancias, vital para el transporte de heridos y enfermos, se ha visto severamente limitado. Muchas ambulancias permanecen inoperativas debido a la falta de combustible, lo que significa que las personas heridas no pueden ser trasladadas a centros médicos para recibir atención.La crisis energética va más allá del sector salud. Los sistemas de tratamiento y distribución de agua potable dependen del combustible para funcionar, y su paralización dejaría a la población sin acceso a este recurso básico. En un territorio donde el agua ya es escasa, esta situación podría precipitar una crisis humanitaria aún mayor.La gestión de residuos, otro servicio crítico para la salud pública, también está en riesgo de colapso. Sin combustible para operar los vehículos de recolección y las plantas de tratamiento, existe el peligro de que se acumulen desechos, creando condiciones propicias para la propagación de enfermedades.
Después de 130 días sin permitir el ingreso de combustible, Israel autorizó esta semana la entrada de una cantidad limitada del recurso. Sin embargo, los 75.000 litros que ingresaron en dos días son considerados insuficientes para atender las necesidades diarias de la población y las operaciones humanitarias vitales.“La urgencia de este momento es innegable. Sin combustible, Gaza se enfrenta al colapso total de las iniciativas humanitarias”, insistieron.
La situación se ve agravada por las continuas restricciones israelíes al acceso de la ayuda humanitaria. Según el portavoz de la ONU, Stephan Dujarric, los equipos pudieron proporcionar parte del combustible que llegó solo a hospitales del sur de Gaza, ya que las autoridades israelíes denegaron los intentos de llevar combustible al norte del territorio.Las estadísticas revelan el alcance de las restricciones: de 15 misiones humanitarias que requirieron coordinación con las autoridades israelíes el jueves pasado, solo seis fueron autorizadas, según la ONU. Cinco fueron denegadas directamente, mientras que cuatro enfrentaron obstáculos que retrasaron o impidieron la entrega de ayuda.
“Cuando finalmente se autorizó la misión ayer, no se encontró a nadie con vida”, lamentó Dujarric.
La población de Gaza, que ya sufre hambre y violencia constante, se encuentra ahora al borde de una catástrofe humanitaria mayor. Miles de personas permanecen expuestas a la intemperie después de que Israel impidiera durante más de cuatro meses el acceso de bienes esenciales como tiendas de campaña y materiales para refugios, denunció la ONU.La declaración conjunta fue firmada por siete organizaciones de la ONU: la Oficina de Asuntos Humanitarios (OCHA), el Programa para el Desarrollo (PNUD), el Fondo de Población (UNFPA), la Oficina de Servicios para Proyectos (UNOPS), la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Fuente: telam