31/12/2025
Tras la advertencia de Donald Trump, Irán dijo que la respuesta ante cualquier ataque sería “dura y desalentadora”
Fuente: telam
Masoud Pezeshkian lanza una advertencia tras las amenazas de Donald Trump sobre una eventual ofensiva militar. La tensión crece entre Irán, Estados Unidos e Israel tras la guerra aérea de junio y nuevas acusaciones nucleares
>El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, advirtió el martes que la respuesta de su país ante cualquier ataque sería “dura y desalentadora”, en lo que pareció un mensaje directo tras las recientes declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la posibilidad de una nueva ofensiva militar estadounidense si Irán reanuda su programa nuclear. Las tensiones aumentaron después de que Trump, durante una conferencia de prensa junto al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu en su residencia de Mar-a-Lago, afirmara que Estados Unidos “tendría que derribar” cualquier intento iraní de reconstruir sus capacidades nucleares, y sugiriera que una acción militar podría ser incluso “más poderosa” que la anterior.
Durante la reunión, Trump manifestó su apoyo a posibles nuevos ataques israelíes contra Irán si este país rechaza un nuevo acuerdo nuclear y continúa avanzando en sus programas de misiles y armas atómicas. La visita de Netanyahu a Florida se enmarca en un clima de creciente hostilidad, tras la guerra aérea de 12 días en junio, en la que murieron cerca de 1.100 iraníes, incluidos altos mandos militares y científicos, y la represalia iraní que dejó 28 fallecidos en Israel.
Mientras tanto, informes israelíes aseguran que Irán está trabajando intensamente en la reconstrucción de su arsenal de misiles, considerado por Tel Aviv una amenaza estratégica junto al programa nuclear. Pese al alto el fuego alcanzado tras el conflicto de junio, medios de ambos países han informado sobre la posibilidad de una reanudación de las hostilidades, ante la falta de una solución diplomática visible.
En el plano interno, Irán insiste en que ya no está enriqueciendo uranio en ninguna instalación, intentando mostrar a Occidente su disposición a negociar. Sin embargo, agencias de inteligencia estadounidenses y la Agencia Internacional de Energía Atómica han señalado que la última vez que Irán tuvo un programa nuclear militar organizado fue en 2003, aunque el país ha llegado a enriquecer uranio al 60%, un nivel cercano al grado armamentístico del 90%.La escalada coincide con una crisis interna marcada por el colapso de la moneda iraní, que alcanzó un mínimo histórico frente al dólar estadounidense. Las protestas, las más grandes en tres años, se extendieron por tercer día consecutivo el martes en Teherán y otras ciudades, donde la policía utilizó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes. Según testigos y videos publicados en redes sociales, hubo enfrentamientos cerca de mercados y en universidades, y los estudiantes protagonizaron concentraciones en varios campus.En respuesta a la crisis económica, el presidente Pezeshkian se reunió con empresarios para atender sus demandas, según reportaron medios locales. Además, el jefe de la Administración Tributaria, Mohammad Hadi Sobhanian, anunció una revisión del régimen fiscal para favorecer a las empresas y la eliminación de multas por retrasos en el pago de impuestos. El gobierno dispuso el cierre de oficinas y bancos el miércoles para gestionar el consumo energético en pleno invierno, además de extender los días de asueto semanal y sumarse a la festividad religiosa del sábado.(Con información de AP y DPA)Fuente: telam



