Un aparatoso accidente de autobús dejó este domingo en Panamá un saldo de 18 muertos y 33 heridos, después de salirse de la carretera y caer en una quebrada, informó el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc). 


Según un comunicado preliminar de esta institución de rescate, 16 ocupantes del vehículo fallecieron y otros 35 resultaron heridos en el accidente ocurrido poco antes de las 14. Horas después Sinaproc informó que dos de los heridos habían fallecido en el hospital. 


El director de Sinaproc, José Donderis, había dicho a  periodistas que varios de los heridos estaban en estado “crítico”.  El presidente Juan Carlos Varela ordenó para el lunes que las banderas panameñas estén a media asta y que se guarde un minuto de silencio en los centros educativos por “estos trabajadores panameños que perdieron la vida camino a cumplir su trabajo”. 


Los hechos tuvieron lugar en la vía Panamericana a la altura de Ciénaga Vieja, en la localidad de Antón (140 km al suroeste de la capital panameña). Donderis afirmó que el vehículo era privado y había salido desde la provincia atlántica de Bocas del Toro con destino a una finca agropecuaria en Chame (a unos 80 km al oeste de la capital). 


Sin embargo, a su paso por Anton, por circunstancias que se desconocen, se salió de la carretera y cayó a una quebrada, arrancando la valla de protección vial. "Es un accidente muy aparatoso”, donde producto del impacto “todo el micro en la parte interior se comprime hacia la parte donde estaba el conductor y muchas personas quedaron atrapadas”, dijo Donderis. 


Además de los que murieron en forma inmediata por el impacto, otros pasajeros “perdieron la vida por inmersión”, ya que tras el accidente “el agua se estaba metiendo en el bus”, añadió Donderis. En imágenes que aparecen en la cuenta de Twitter de Sinaproc, se ve el autobús de color blanco volcado sobre su lado derecho con distintos enseres esparcidos por el área y varios cuerpos tapados con mantas. 


Helicópteros y ambulancias trasladaron a los heridos a distintos centros hospitalarios. Según la organización Frenadeso, que aglutina a diversos sindicatos panameños, los fallecidos eran trabajadores indígenas que iban a trabajar en la cosecha de sandía.