En Tierra del Fuego una nueva fábrica textil baja sus persianas, dejando, en este caso, a 28 trabajadores en la calle. Yamana, que comercializa sábanas en Buenos Aires, cierra por una deuda millonaria que tiene la firma. En comunicación con "Crónica", delegados sostuvieron que "nos quieren pagar el 60% de las indemnizaciones. No falta mucho para que tomemos la planta". Este conflicto agudiza aún más la situación del sur.

En época de crisis, 28 bocas viven con la incertidumbre, no sólo del mañana, sino también del hoy. Porque el último martes, la fábrica ubicada en Río Grande amaneció con sus puertas cerradas. "En la empresa se sabía que esto iba a pasar", le contó a este medio Miriam Planes, integrante de la comisión directiva de Soiva (Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines), gremio que nuclea a 22 de los trabajadores echados. El resto pertenece a Setia.

Según contó, la planta había cerrado sus puertas en 2011, abriendo nuevamente en 2012. En aquel entonces, los trabajadores iniciaron juicios que sumaron 60 millones de pesos. Por eso, el dueño actual -Daniel Sabrina- argumenta que se hace inviable seguir produciendo.

La historia de los trabajadores se recrudece aún más cuando, simplemente mediante un comunicado, se enteraron de que el empresario pretende abonarles solamente el 50% de la indemnización por un "preventivo de crisis que presentó en el Ministerio de Trabajo de la provincia". Planes manifestó que "el viernes tuvimos una audiencia en la cual ofreció, a través de su abogada, abonar el 60 por ciento. Pero nosotros buscamos el 100%, como corresponde". En esa línea, desde el Ministerio de Industria le dijeron a Sabrina que deberá abonar, durante los próximos seis meses, el 50% del sueldo a los empleados".

Si bien los trabajadores abandonaron sus puestos de trabajo, "estamos en alerta por miedo a un vaciamiento". "No falta mucho para que tomemos la planta", advirtió.