Un micro de turistas se quemó por completo este lunes a raíz de un accidente ocurrido en una autopista del sur de Alemania. Según las primeras informaciones, 11 personas murieron y unas 30 resultaron heridas.

El vehículo, que llevaba a bordo a 46 turistas ancianos, junto a dos choferes, que venían de la región de Sajonia, se encontró en un atasco de tránsito y chocó contra un camión que circulaba adelante. El micro se incendió y se quemó por completo.

El accidente tuvo lugar en la autopista A9, a la altura de Stammbach, una zona boscosa y montañosa en la frontera entre los estados de Baviera y Thuringe, cerca de la frontera con la República Checa.

El ministro de Transporte, Alexander Dobrindt, describió la dantesca escena: "El calor era tal (...) que solamente la estructura de acero es reconocible. Uno puede imaginar lo que ello significa para los pasajeros de este autobús".

Varios helicópteros de rescate se desplazaron al lugar del accidente, mientras técnicos, policías y socorristas trabajaban en torno a la carcasa ennegrecida del micro. Fueron movilizadas más de 200 personas.

Precedentes en Europa

La canciller Angela Merkel está "conmocionada" por el drama, indicó su portavoz Steffen Seibert, transmitiendo todos los "pensamientos" de la dirigente "a las víctimas y a sus familiares, así como a los heridos".

En Alemania, el accidente de micro más grave registrado en los últimos diez años había dejado 20 muertos en una autopista cerca de Hannover, en el oeste del país, el 4 de noviembre de 2008. Eran en su mayoría personas ancianas y la tragedia se debió aparentemente a un pasajero imprudente que fumó en los aseos del vehículo.

En Francia, una colisión frontal entre un camión y un micro en que viajaban personas de la tercera edad mató a 43 personas en Puisseguin, en el suroeste, el 23 de octubre de 2015. Ambos vehículos ardieron rápidamente, atrapando a los pasajeros en su interior.

En Ucrania, 45 personas fallecieron en la colisión de un tren con un autobús en un paso a nivel en Marganets, en el centro-este, el 12 de octubre de 2010. Fue el accidente más mortífero ocurrido en los últimos diez años en Europa.

El pasado 21 de enero, un micro húngaro en que viajaba un grupo de adolescentes se incendió tras chocar contra el pilar de un puente al salir de la autopista de Verona, en Italia, cuando regresaban de un viaje escolar a los Alpes franceses. El accidente dejó 16 muertos. El valor de un profesor de educación física, que regresó varias veces al vehículo a buscar alumnos pese a que él mismo estaba gravemente herido, evitó un balance aún más grave.