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Un preso que purga una condena por robo calificado en el penal de Florencio Varela y estaba beneficiado con libertad transitoria habría participado del intento de robo y asesinato del policía José Zurita en la localidad bonaerense de Ezpeleta, partido de Quilmes.

Fuentes de la investigación informaron que el sospechoso, horas después de cometido el asesinato de Zurita, se presentó en La Unidad Penal 24 de Florencio Varela, donde purga condena, y quedó detenido e incomunicado por su posible vinculación con el hecho.

Por el asesinato del oficial de la Policía Local de Quilmes desde el lunes está detenido el dueño del auto que usaron los responsables del ataque, quien indicó que el vehículo se lo había llevado su hijo.

El hecho que se adjudica a los detenidos fue cometido en la noche del domingo, alrededor de las 20.30, en la avenida San Martín entre Antonio Zolezzi y Chile, frente a la estación Ezpeleta del Ferrocarril Roca, donde dos ladrones armados intentaron robarle el arma al oficial Zurita, que esperaba un colectivo en la parada existente a pocos metros de la entrada al supermercado Día.

El policía, según los informantes, al advertir la actitud de los delincuentes intentó ingresar al comercio pero fue atacado y herido de seis disparos por la espalda que le provocaron la muerte.

Los ladrones, al frustrarse el robo por la presencia de numerosas personas, escaparon en un auto Renault 9, según declararon testigos que aportaron a los investigadores los datos de la patente.

La policía implementó un amplio operativo en la zona en busca del auto y lo encontró en el garaje de una casa ubicada en la calle 124 al 2400, en El Pato, en el partido de Berazategui, por lo que detuvo a su propietario.

El detenido, según los informantes, fue llevado a la comisaría 6ta., donde contó que el auto lo había usado su hijo, de 25 años, que también sería un recluso favorecido con salidas transitorias y que el día del asesinato de Zurita regresó temprano al penal donde purga condena.

El efectivo asesinado, casado y padre de una niña de corta edad, hasta hace dos años -antes de ingresar a la Policía Local de Quilmes- ofició de catequista de una iglesia de la zona y misionero.